Comienza tu día con una sonrisa, verás lo divertido que es ir por ahí desentonando con todo el mundo.
Mafalda.

jueves, 27 de marzo de 2014

Eternos sonrientes por sobredosis de amor.


No se como se empieza a escribir una carta que nunca llegará a destino. Creo que nadie sabe y eso me da la libertad de hacer fluir las palabras, aún sin sentido.
Estan juntos nuevamente, y supongo que sentirán orgullo de vernos crecer sonrientes y repletos de amor como uds nos enseñaron.
Miles de historias llevamos en nuestra mente, anecdotas imposibles de olvidar y que de vez en cuando salen a la luz por algun motivo. Historias de risas, peleas y llantos. 
Historias de vida por sobre todas las cosas..Porque si de algo estamos seguros es de que nosotros SI aprendimos a vivir la vida, y es todo gracias a uds. 
Aprendimos a amar los segundos, minutos y horas compartidos en pequeñas y grandes multitudes. 
Aprendimos a aceptar los errores del otro, a amarnos mas en las diferencias, a brindar una mano aunque sea mínima la ayuda.
Aprendimos que la distancia no es importante, solo son kilómetros de amor que nos unen día a día. 
Aprendimos que las dietas nos consumen alegrías, y que no hay reunión sin comida ni bebida.
Aprendimos que hasta en los mejores días de sol pueden caer tormentas que nos harán trasladar bajo techo toda una mesa servida, en cuestión de segundos.
Aprendimos que no hay mates sin rasquetas.
Aprendimos a hablar todos juntos y entendernos igual.
Aprendimos a gritar para callarnos.
Aprendimos a reírnos sin motivos hasta que nos duela la panza.
Aprendimos a adaptarnos en espacios reducidos.
Aprendimos a juntar limones, mandarinas, ciruelas.. y por supuesto a comer sin lavar las frutas.
Aprendimos tantas cosas que no nos alcanzara ni la eternidad para describirlas.
Somos inmunes a todo.. a todo lo malo que nos pueda pasar.
Hasta somos inmunes al dolor porque aprendimos a ser felices. 
Con el paso del tiempo entendimos lo que significa vivir feliz y se lo debemos a ustedes.
Nuestras lágrimas son amor, no podrían ser otra cosa.. y lloraremos siempre que lo necesitemos para recordar que el amor existió físicamente en nuestras vidas, que es nuestra base.. nuestro comienzo y final.
Lloraremos porque cada lágrima es una carica de amor para el alma.
Su amor es eterno. Como el nuestro.
Somos cuerpos y almas sonrientes.
Eternos sonrientes por sobredosis de amor.